19 de agosto de 2009

UN DIA EN LA PLAYA Y SUS BENEFICIOS

Un día de playa





Niños disfrutando un día de playa






Me imagino que muchos de vosotr@s estaréis disfrutando de unos buenos días de playa, ya sea porque vivís cerca de el o porque pasareis unos días de vacaciones. Buscando información sobre el mar encontré esto que me pareció interesantisimo porque además de pasar un día estupendo y divertido en la playa también tiene propiedades beneficiosas para la salud, con todo esto ya no tenemos excusas para no ir, olvidemonos de todas las excusas que ponemos (el calor, el camino de llegada y luego el de vuelta, la cantidad de accesorios que tenemos que llevar como la sombrilla, sillas, nevera, la comida, ... ) y pensemos en todos los beneficios que nos da, como veis vale la pena pasar por todo ello, pero sobre todo y lo principal es lo que disfrutan los peques con estos días de playa con esto deberíamos tener suficiente para ir.




"El mar, un sinfín de beneficios


La playa no es sólo una elección más a la hora de pasar las vacaciones, disfrutar del mar tiene efectos saludables para todo el organismo. El sabor salado del agua proviene de su riqueza en sodio, pero el agua del mar contiene más de 75 elementos diferentes que la hacen única y muy rica en minerales.

No hace falta que te la bebas, algunos de estos minerales pueden llegar a ser absorbidos por la piel como el potasio, el calcio, el azufre, el magnesio y el yodo.

Basándose en este hecho surge la talasoterapia, un tratamiento de hidroterapia que utiliza el agua de mar para aliviar y reducir problemas de salud.



Sol

El astro rey es el responsable de la vida sobre el planeta. Ejerce un efecto estimulante, aumenta la energía, nos pone morenos y favorece la síntesis de vitamina D. Además disminuye el apetito, tiene un efecto antibiótico y estimulante de las defensas y favorece el optimismo. Claro que no debemos olvidar sus efectos negativos, por lo que se deben tomar baños de mar y sol con fotoprotección adecuada, procurando evitar el sol entre las 12:00 y las 16:00, que es cuando más daña la piel.



Aires de mar

El mar no es sólo agua en movimiento, el aire que forma la brisa marina de las playas presenta unas condiciones muy especiales. Esa sensación de felicidad y tranquilidad que te invade cuando das un paseo por la playa se produce por la presencia de iones negativos que se generan con el oleaje continuo del mar.

Estos tienen un efecto relajante y antidepresivo, promueven la liberación del neurotransmisor serotonina que provoca la sensación de bienestar. A 100 m del mar llegan a contabilizarse 50.000 iones negativos en el aire por metro cúbico, mientras en las ciudades no suele pasar de 500. El agua y las sustancias salinas en suspensión crean un microclima húmedo con gotitas de agua y oligoelementos en suspensión que se pueden absorber a nivel pulmonar, como el yodo. Cuanto más agitado está el mar, mayor es el número de micropartículas en suspensión. El ozono natural también es producido por el mar, actúa como purificador del aire por sus virtudes antisépticas.



Sales minerales y minerales

En el agua de mar se encuentran disueltos una gran cantidad de minerales y oligoelementos. El más abundante es el sodio, que da el sabor salado al agua y se encarga del control del reparto del agua en las células en la bomba de sodio/potasio que se ocupa de expulsar el sodio hacia el exterior. El sodio también es necesario para la conducción del impulso nervioso, haciendo posibles las contracciones musculares. Por esta razón el agua de mar es uno de los mejores tratamientos para recuperar los músculos y para rehidratarse adecuadamente después de un esfuerzo intenso, pues en 100 ml de sudor se pueden llegar a perder entre 75 y 250 mg de sodio. También abunda el potasio, que interviene junto al sodio y regula la cantidad de agua en las células. Otros elementos son el calcio, magnesio, azufre, silicio y yodo.



Arena

Un simple paseo descalzo por la orilla de la playa actúa como una sesión de masaje en los pies, las pequeñas partículas de la arena blanda actúan como una almohadilla natural que promueve el movimiento correcto del pie (talón-punta) y actúan como exfoliante natural en la planta de los pies. Si la playa es de

piedras redondeadas, el paseo es más incómodo pero también es un sistema más efectivo al estimular con más intensidad la circulación sanguínea.



Altitud: nivel del mar

Si los deportistas suben a entrenar en altitud para aumentar el hematocrito, en el mar los efectos no son nada desdeñables: a nivel del mar disminuye la presión sanguínea y la tensión arterial, aumenta el número de glóbulos blancos responsables de la defensa, el nivel de hierro y se regulan los niveles hormonales, pues el sol favorece la producción de testosterona, hormona que favorece el crecimiento muscular. También hay que tener en cuenta que baja la tensión arterial y eso te puede hacer sentir con menos ganas de ejercitarte, efecto al que te sueles adaptar en unos días.



Humedad y temperatura

La elevada humedad que existe en las zonas cercanas al mar favorece la respiración y facilita el intercambio de gases en los pulmones. Además el agua ejerce un efecto termo-regulador, pues enfría rápidamente un cuerpo calentado por el sol durante el día, o calienta un cuerpo frío por la noche."


Información en la pagina de SporLife.






"Conozca y disfrute de los beneficios del mar


Cuando acudimos en vacaciones a la playa buscamos refrescarnos y también algo de diversión, pero esos no son los únicos beneficios que obtenemos. El agua del mar actúa en nuestro organismo como una terapia curativa ante el dolor y numerosas enfermedades. Es lo que se denomina Talasoterapia.


Estrés, ansiedad, malhumor, depresiones, presión, etc, son las causas del precio que hoy en día pagan hombres y mujeres contemporáneos por vivir en una sociedad tan cambiante como agitada. En ocasiones, su estilo vida no es el más óptimo, afectando así su organismo. Por ello, en épocas de vacaciones como el verano se busca "desconectarse" de esa vorágine y "cargar pilas".


La playa es uno de los destinos de descanso favorito. Sin embargo, la mayoría de las personas desconocen que el mar es también una increíble fuente de salud. Los beneficios que reportan los baños y el clima marino han dado lugar a lo que se conoce como Talasoterapia, una terapia con muchos años de constatación que ya era aplicada en su época por griegos y romanos.


Proveniente del término griego "thálassa", que significa mar, y "therapia", tratamiento, consiste en la utilización de este tipo de agua con fines curativos, y es el conjunto de beneficios que reporta a nuestra salud el contacto del organismo humano con el medio marino y sus elementos.




Una terapia de origen milenario


El mar es el origen de la vida, y desde tiempos remotos se conocen los efectos beneficiosos que tienen los baños de agua del mar sobre el hombre. Existen referencias del poder del clima en papiros egipcios, e incluso Homero se refería a este elemento como la forma en que Ulises recuperaba sus fuerzas.


Ya en la antigua Grecia Hipócrates, conocido como el "padre de la medicina", recomendaba el uso de este tipo de agua en forma de baños y cataplasmas como tratamiento para diferentes dolencias.


A lo largo de la Edad Media el agua de mar se siguió utilizando en diversos tratamientos basándose siempre en la creencia, cada vez más extendida y estudiada, de las propiedades curativas del medio marino.


Sin embargo, fue en el siglo XVIII cuando este tipo de terapia tuvo su mayor auge al ponerse de moda en Inglaterra los baños termales con agua del mar, práctica que rápidamente se extendió por el resto de Europa y del mundo dando lugar a la creación, primero, de verdaderas ciudades termales y, más tarde, de los pioneros centros de talasoterapia en los que además del agua de mar cobra cada también importancia todo el conjunto que elementos que componen el clima marino. En la actualidad existen centros especializados en este tipo de terapia en la mayoría de las zonas costeras.


El agua del mar como medicina El mar posee unas propiedades que hacen de él un "medicamento" muy saludable para nuestro organismo. Contiene más de 75 cuerpos o elementos considerados como necesarios para el buen funcionamiento del metabolismo humano. Algunas de estas sustancias de origen marino tienen propiedades biológicas muy beneficiosas por ser antitumorales, antibacterianas y antivirales.


Un ejemplo son los oligoelementos (yodo, sodio, potasio, zinc, etc), que no se encuentran en el agua dulce, y que tienen efectos curativos para tratar determinadas enfermedades. Y es que cuando nuestro cuerpo entra en contacto con el agua salada, en la superficie cutánea se produce lo que se conoce como osmosis, que consiste en un intercambio por el cual nuestro cuerpo "absorbe" estos elementos del mar produciéndose una renovación de los mismos en nuestro organismo.


La densidad del agua salada (que es 2,5 veces superior a la del agua dulce) permite, además, que los movimientos sean más fáciles de realizar, lo que favorece que se produzca una mayor relajación muscular.


También el movimiento de las olas repercute de modo beneficioso en el organismo humano, ya que ejerce sobre el cuerpo una acción tonificante que equivale a un hidromasaje natural proporcionando una sensación de bienestar.


Pero además, el mar posee elementos marinos que nos ayudan a revitalizarnos. Es el caso, por ejemplo, de las algas, que contienen casi todos los tipos de vitaminas y que aplicadas sobre el cuerpo se ha comprobado que provocan efectos antioxidantes, antivirales y previenen el envejecimiento de la piel.




El clima otro factor saludable


Además del agua y las sustancias y elementos que en ella existen, el mar proporciona un componente esencial en el reestablecimiento y mejoría de la salud, el clima.


El aire marino está saturado de minúsculas gotas de agua de mar y es rico en ozono, yodo e iones negativos, lo que hace que tenga propiedades antibióticas, calmantes del sistema nervioso y que además estimule la acción de las defensas del organismo.


En general en la costa los vientos siempre están presentes, ya sea en forma de suave brisa, viento moderado o fuerte, y todo este aire "golpea" sobre nuestra piel como si de un masaje se tratara, a la vez que deposita sobre ella sales marinas, muy beneficiosas ya que dotan de mayor vitalidad y flexibilidad a nuestra dañada piel.


También el descenso de la tensión arterial es notable cuando se está en la orilla del mar, ya que los ambientes húmedos tienen ese efecto sedante, el cual produce en nuestro cuerpo una relajación importante, que será mucho mejor si la temperatura ambiental se encuentra entre 20 y 30 grados.




Beneficios para todos


Tanto en institutos o centros especializados en talasoterapia como en la propia playa, el agua de mar permite obtener importantes beneficios físicos y psíquicos. Es un proceso beneficioso para cualquier persona, ya que además de contribuir en la disminución de dolores, produce una importante mejoría en numerosas patologías, reduciendo el consumo de medicamentos y el tiempo de convalecencia de algunas enfermedades.


Son muchas las afecciones que pueden mejorar con los baños de mar: desde respiratorias, musculares y dermatológicas, hasta cardíacas, infecciosas, metabólicas y reumáticas, entre otras. Los niños y los ancianos son quienes más suelen notar sus efectos, aunque también las personas que padecen estrés mejoran prontamente.


Desde el punto de vista físico, los efectos más inmediatos son de tipo muscular, por ello este tipo de terapia es muy utilizada entre los deportistas, ya que con los baños relajan la musculatura tras el esfuerzo que realizan, y ayudan a la recuperación de lesiones musculares y articulares.


También es eficaz para tratar los problemas de obesidad y de estrés, a la vez que patologías como el insomnio, la osteoporosis, la artritis, el reumatismo, el asma o la faringitis. Además, favorece la circulación de la sangre, revitaliza los tejidos, tiene un efecto desinflamatorio, y equilibra y retrasa el envejecimiento de la piel.


Asimismo, la talasoterapia también está indicada para madres que acaban de dar a luz o para recuperarse de procesos post traumáticos, post quirúrgicos o episodios infecciosos, entre otros muchos problemas de salud.


En definitiva, algo tan simple y a la vez divertido como es bañarse en el mar puede resultar, con un poco de constancia y dedicación, la mejor medicina para su organismo. Su cuerpo y Su mente se lo agradecerán."


Información en esta pagina.



Después de leer esto seguro que ya no tenéis mas excusas para pasar un día de playa, verdad?.




3 comentarios:

  1. Pepa perdona pero no me di cuenta y se borro el mensaje que me dejaste. Tuve que borrar esa entrada porque las letras me salian como le daban la gana, unas mas grandes que otras y por eso lo hice de nuevo, con ello no me di cuenta que se borro tu mensaje aunque si me dio tiempo de leerlo, ademas era muy interesante lo que me comentaste que te dijo el medico con el asma de tu hijo que cada sorbo de agua del mar era un tarro de medicamentos menos, otra ventaja mas para ir a la playa pensar en la salud de los nuestros.



    Lo siento y perdona que se borrara, un saludo y gracias por todo.

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  2. Es estupendo que nos cuentes las propiedades del mar. Por desgracia o por suerte, tengo la ventaja de vivir muy cerquita y nos aprovechamos en esta època
    Gracias
    Un beso

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  3. No te preocupes, eso nosp uede pasar a todos.
    Así es, el pediatra nos dijo eso, es como poner suero en la nariz; y además mucho mejor y mas natural.
    Un saludo

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Muchisimas gracias por vuestros comentarios y como agradecimiento os deseo todo lo mejor.